Cómo mejorar el estilo literario: Algunas consideraciones

Escribir puede ser un desafío emocionante para cualquier persona que quiera mejorar su estilo. Aunque cada texto es único, hay algunas técnicas generales que pueden ayudar a mejorar el estilo de cualquier escritor. Aunque J.M. Coetzee afirma: “creo que es un error dar instrucciones para escribir”, haremos unas consideraciones generales que pueden ayudar.

    1. Pensar despacio lo que queremos escribir: Es importante tomarse el tiempo para pensar cuidadosamente en lo que queremos escribir, especialmente en mensajes importantes o formales. Esto nos ayuda a asegurarnos de que nuestro mensaje sea claro y preciso, y evita confusiones o malentendidos. Además, tomarse el tiempo para reflexionar nos permite expresar nuestros pensamientos de manera más coherente. 

    1. Leer y escribir mucho, si es posible todos los días: Leer y escribir de manera regular puede tener muchos beneficios. La lectura puede expandir nuestros conocimientos y nuestra comprensión del mundo, así como mejorar nuestra capacidad de concentración y atención a los detalles. La escritura, por otro lado, puede ayudarnos a desarrollar nuestra capacidad de expresión y comunicación, así como a organizar nuestras ideas de manera más clara y coherente. Además, ambas actividades pueden ayudarnos a mantener nuestro cerebro activo y en forma.

    1. Trabajar por fragmentos ayuda: Puede ser una técnica útil para estudiar o analizar una obra literaria. Consiste en dividir la obra en fragmentos más pequeños, como capítulos o escenas, y abordar cada fragmento de manera individual. Esto puede ayudarnos a comprender mejor la obra en su conjunto y a desentrañar sus temas y mensajes de manera más profunda. Al trabajar por fragmentos, también podemos prestar atención a detalles específicos y hacer anotaciones o preguntas que nos permitan profundizar más. 

    1. Encontrar un hilo conductor que se mantenga. El conflicto despierta el interés: Conseguir que se mantenga a lo largo de una obra literaria puede ayudar a mantener el interés del lector y a darle coherencia y sentido a la obra. Un conflicto es un elemento comúnmente utilizado para crear ese hilo conductor, ya que puede mantener la tensión y el interés del lector a lo largo de la obra. El conflicto puede ser interno, es decir, relacionado con la lucha o conflicto interno del personaje principal, o externo, relacionado con la lucha o conflicto del personaje principal con fuerzas externas, como otros personajes o el entorno. 

    1. Rescatar la memoria que fundamente la historia: La memoria puede proporcionar detalles y elementos que dan sentido a la historia y le dan vida a los personajes y escenas. Al rescatar la memoria, también podemos explorar temas y preguntas más profundas y dar a la historia una dimensión más amplia y significativa. Además, utilizar la memoria como una fuente de inspiración o como un elemento central de la narración puede ayudar a crear una historia única y original.

    1. Elegir cuidadosamente los personajes principales y secundarios: Debes considerar sus personalidades, objetivos y motivaciones, así como cómo encajan en la historia y cómo pueden ayudar a contarla de manera efectiva.

    1. El narrador y el punto de vista son esenciales: El narrador es la voz que cuenta la historia y puede ser el protagonista o un personaje secundario, o incluso una voz en off o un narrador omnisciente. El punto de vista, por otro lado, se refiere a desde dónde se cuenta la historia y puede ser en primera o tercera persona. El narrador y el punto de vista tienen un gran impacto en la forma en que se presenta la historia y pueden influir en la manera en que el lector interpreta y se relaciona con la obra.

    1. Coherencia y cohesión, así como el ritmo deben ser cuidados: Ayuda a darle sentido y a hacerla más fácil de seguir para el lector. La coherencia se refiere a que todos los elementos de la historia sean consistentes entre sí y encajen de manera lógica. La cohesión, por otro lado, se refiere a que todos los elementos de la historia estén relacionados de manera clara y coherente. Además, el ritmo de la historia también es importante, ya que puede afectar la manera en que el lector experimenta la obra. Un ritmo lento puede proporcionar tiempo para reflexionar y disfrutar de los detalles, mientras que un ritmo rápido puede crear tensión y mantener al lector pegado a la historia. 

    1. Buscar el espacio de la verdad y el compromiso. Verosimilitud: No necesariamente se refiere a la veracidad histórica o a la precisión en los detalles, sino más bien a la credibilidad y a la sensación de verdad que se transmiten a través de la historia. Por lo tanto, buscar el espacio de la verdad y el compromiso puede ayudar a aumentar la verosimilitud de nuestra obra y a hacerla más creíble y conectada para el lector.

    1. Sencillez y selección: La sencillez se refiere a la simplicidad y la claridad en la narración, mientras que la selección se refiere a la elección cuidadosa de los elementos que se incluyen en la historia. Al buscar la sencillez y la selección, podemos asegurarnos de que nuestra historia sea clara y fácil de seguir y de que transmita el mensaje o la emoción que deseamos de manera efectiva.

    1. Buenas dosis de inteligencia, elegancia y sentido del humor: La inteligencia puede ayudar a proporcionar una perspectiva profunda y reflexiva a la historia y a explorar temas y preguntas más profundos. La elegancia puede ayudar a crear una narración clara y coherente y a transmitir un mensaje de manera sutil y sólida. El sentido del humor, por otro lado, puede añadir un toque de ligereza y diversión a la obra y hacer que el lector se sienta más conectado y relajado.

    1. Simplificar:  Los escritores deben buscar maneras de simplificar y cortar frases sin sacrificar la precisión y el significado. El éxito de la oración larga y extensa aparece en grandes escritores como Javier Marías.

    1. Jugar con las palabras y la imaginación: La elección cuidadosa de palabras y frases puede ayudar a transmitir el tono y la emoción de la historia de manera más efectiva. Además, la imaginación puede ayudar a crear mundos y escenarios únicos y a dar vida a personajes y situaciones inesperadas. Jugar con las palabras y la imaginación puede ser una forma divertida y creativa de explorar diferentes formas de contar una historia y de llegar a un público amplio y diverso.

    1. El escritor se compromete a descubrir las verdades que se ocultan detrás de la experiencia humana: A través de la exploración de personajes, conflictos y temas profundos, el escritor puede tratar de entender y transmitir las verdades fundamentales de la experiencia humana. Esto puede incluir preguntas y dilemas universales, como la identidad, el amor, la amistad, el sentido de la vida y la muerte. Al comprometerse con el descubrimiento de estas verdades, el escritor puede tratar de crear obras que sean significativas y que tengan un impacto profundo en el lector.

    1. De dentro a fuera o de fuera a dentro, las emociones llegan: La forma en que presentamos las emociones en una obra literaria puede tener un gran impacto en la forma en que el lector experimenta la historia. Una forma de presentar las emociones es de dentro a fuera, es decir, mostrando cómo se sienten los personajes por dentro y cómo sus emociones afectan su comportamiento y acciones. Esto puede ayudar a que el lector se conecte con los personajes y a comprender mejor sus motivaciones y decisiones. Otra forma de presentar las emociones es de fuera a dentro, es decir, mostrando cómo el comportamiento y las acciones de los personajes reflejan sus emociones internas. 

    1. Contar sueños repetidamente puede ser aburrido: Los sueños pueden ser un elemento interesante y evocativo en una historia, ya que pueden proporcionar una mirada única en la mente y los sentimientos del personaje; Sin embargo, si se utilizan de manera excesiva o sin un propósito claro, pueden distraer al lector y desconectarlo de la historia principal. 

    1. El título, el comienzo y el final darán el toque original. Hay quien recomienda poner el título al final: El título puede atraer al lector y darle una idea de lo que va a encontrar en la obra. El comienzo, por otro lado, puede establecer el tono y la atmósfera de la historia y captar el interés del lector. El final, por último, puede cerrar la historia de manera satisfactoria y dejar al lector con una impresión duradera. Algunos escritores prefieren poner el título al final, una vez que han terminado la obra, ya que pueden tener una mejor idea de qué título encajaría mejor con la historia. Otros, sin embargo, prefieren poner el título al principio, ya que puede ayudarles a enfocar y guiar su trabajo. En cualquier caso, es importante prestar atención al título, al comienzo y al final de una obra literaria para asegurarse de que sean efectivos y atractivos para el lector.

    1. Repasar y corregir: Asegurarnos de que todos los elementos de la historia encajen de manera coherente y que la narración sea clara y fácil de seguir. También podemos buscar errores ortográficos, gramaticales o de puntuación y corregirlos para mejorar la calidad de nuestro trabajo. Repasar y corregir también nos permite ajustar el ritmo y el tono de la historia y asegurarnos de que transmita el mensaje o la emoción que deseamos.

    1. La tradición y la admiración literaria son fundamentales en el proceso de creación: A través  del conjunto de obras y autores que han influenciado o influyen en una determinada época o lugar, y puede proporcionar una base sobre la cual construir nuestra obra. La admiración literaria, proporciona una fuente de inspiración y motivación para nuestro propio trabajo.

    1. La confrontación de los miedos y las inseguridades: Al enfrentar nuestros miedos e inseguridades, podemos liberarnos de ellos y permitirnos explorar temas y perspectivas que de otra manera podríamos evitar. Además, la confrontación de nuestros miedos e inseguridades puede ayudarnos a crear obras más auténticas y sinceras y a conectarnos de manera más profunda con nuestros personajes y nuestra historia. Además, no hay nada de malo en pedir consejo o en buscar críticas constructivas de otras personas. Esto puede ayudar a los escritores a ver sus trabajos desde una perspectiva diferente y a mejorar sus habilidades.

La literatura es una pasión y una forma de acercarnos al mundo, al tiempo que reivindica nuestra conciencia individual, nos emancipa y nos libera, igualmente nos permite compartir vivencias y sentimientos lo que ensancha y mejora nuestra vida.

Una de las técnicas de escritura más importantes para mejorar el estilo es la escritura descriptiva. La descripción es esencial para crear una sensación de realismo y ambiente en un relato. Al utilizar detalles específicos y lenguaje evocativo, los escritores pueden hacer que sus lectores se sientan como si estuvieran realmente allí, experimentando lo que está sucediendo en la historia.

Otra técnica de escritura importante es la utilización de diálogos efectivos. Los diálogos pueden ayudar a avanzar la trama, a revelar aspectos de los personajes y a crear tensión. Los diálogos también pueden ser una oportunidad para que los escritores jueguen con el lenguaje y el tono, y para que añadan humor o ironía a sus relatos.

También deben evitar la ambigüedad y la confusión, y asegurarse de que sus lectores puedan seguir fácilmente el hilo de la historia.

Además, no hay nada de malo en pedir consejo o en buscar críticas constructivas de otras personas. Esto puede ayudar a los escritores a ver sus trabajos desde una perspectiva diferente y a mejorar sus habilidades.

En resumen, hay muchas maneras de mejorar el estilo a la hora de escribir, por ejemplo, para los relatos. a escritura descriptiva, el uso efectivo de diálogos, la coherencia y la claridad, la simplicidad y la confrontación de los miedos y las inseguridades son algunas de las más importantes. Al practicar y mejorar en estas áreas, los escritores pueden desarrollar un estilo más fuerte y crear historias más atractivas y convincentes.

Libros que nos pueden ayudar:

-R.A.E. Libro de estilo de la lengua española

-Stephen King, Mientras escribo

-Antón P. Chéjov, Sin trama y sin final

-Gustave Flaubert, Sobre la creación literaria

-Gabriel García Márquez, Cómo se cuenta un cuento

-Daniel Cassany, La cocina de la escritura

-Vladimir Propp, Morfología del cuento

-Natalie Goldberg, El gozo de escribir. El arte de la escritura creativa

-Wislawa Szymborska, Correo literario.

-Marcel Proust, Escribir

-Marguerite Duras, Escribir

-Raymond Queneau, Ejercicios de estilo

-El guión, Robert Mckee

-La escritura transparente, William Lyon

-Vivian Gornick, Cuentas pendientes

Danilo Kis, Consejos a un joven escritor

Virginia Woolf, Carta a un joven poeta

Charles Baudelaire, Consejos a los jóvenes escritores.

Haruki Murakami, De qué hablo cuando hablo de escribir.

Charles Bukowsky, La enfermedad de escribir.

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